Cada año es diferente, sí. Pero se repiten una serie de factores los cuales los podríamos llamar cíclicos. Para todos, un nuevo año es una nueva oportunidad de conseguir aquello que ansiamos desde hace tiempo; adelgazar, rejuvenecer, cuidarnos más la piel… Es por ello que hay épocas del año donde tenemos un comportamiento semejante entre varios grupos poblacionales, sobre todo entre las mujeres.
Después de Navidad
Cenas familiares, turrones y polvorones, excesos… Se nos va de las manos y no podemos remediarlo. No tenemos la suficiente fuerza de voluntad de restringir estos excesos y luego, en enero lo lamentamos. Siendo así, en enero es uno de los meses donde los gimnasios tienen avalancha de clientes buscando rebajar dichos kilitos de más.
El problema es cuando vemos que no se quitan en un par de semanas y lo abandonamos de nuevo. Es un error, porque coger kilos es muy fácil y rápido. Pero quitarlos es un proceso más lento y costoso. ¡Frente a ello debemos ser fuertes!
Cuando empieza el calor
Está a punto de empezar la primavera y ya nos acecha el miedo del verano. Empezamos la operación bikini, pero nos dura nada y menos. Siempre es lo mismo, conseguir un objetivo físico (adelgazar sobre todo) es un procedimiento a medio/largo plazo. Es terrible para nuestra mente ya que ¡queremos resultados inmediatos!
Pero no solo nos empieza una preocupación por el peso, sino también por la apariencia facial y de nuestra piel. Cuando damos por finalizada la temporada del frío, nos damos cuenta que ha llegado el momento de enseñar más. Si tenemos varices, celulitis, arrugas y manchitas queremos ponerle solución. Ya sabes que si es tu caso, las mejores soluciones son las menos intrusivas. Aquí, en Clínicas Vicario tenemos varios tratamientos que harán que no te tengas que preocupar.
Después de verano
Una vez han pasado las vacaciones veraniegas, nos hemos dado cuenta que también nos hemos excedido. Las terracitas, tapas, cervezas y quedadas con amigos y familiares no ayudan a mantener la línea y por consiguiente, cogemos unos kilos de más.